Mi querido amigo/amiga.
No tenemos que ganarnos nuestro valor: es nuestro derecho de nacimiento. Desde el momento en que llegamos al mundo, ya somos seres increíblemente valiosos . Sin embargo, con el paso del tiempo, vamos construyendo un diálogo interno al que le damos poder y puede ir borrando esa verdad esencial. Las dudas, los miedos y lo que nos han dicho que somos o que deberíamos ser, estás palabras quedan grabadas en el subconsciente y nos hacen olvidar el potencial de lo que realmente somos.
En ningún momento debemos darnos por vencidos . De eso trata la existencia. Las posibilidades son infinitas y siguen vivas, latentes en nuestro corazón, esperando a ser descubiertas en cualquier momento, a cualquier edad. Con pasión y entrega, es posible construir realidades maravillosas , incluso en el último día de nuestro paso por aquí.